7 agosto, 2014 By malgobierno

¿Para César Camacho son más importante los votos que la justicia?

Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre fue denunciado por Carmen Aristegui en un reportaje muy ámplio y detallado que se transmitió por MVS sobre la forma de captar mujeres para formar parte de su grupo de atención personal, a través de favores sexuales.

Además de una grabación de cuatro horas hecha por una reportera en cubierta, la publicación de anuncios, perfiles de Facebook y documentos de la nómina del PRI en el que se demostraba que las edecanes de Gutiérrez de la Torre estaban dadas de alta en la nómina de la representación capitalina del tricolor. Además de esto, se sumaron denuncias y testimonios ante la PGR.

La respuesta del PRI capitalino y del mismo Gutiérrez de la Torre fue una campaña mediática de mentiras para desmentir los hechos, hechos que a todas luces lo señalaban como responsable de explotación sexual. El partido anunció su separación de la presidencia  y el inicio de una investigación interna, pero no su expulsión, muchas reservas para opinar por parte de sus correligionarios, la falta de cobertura por muchos medios y la intensión de involucrar a personas que históricamente han luchado contra la trata de personas en México con supuestas amenazas, sólo aumentaban las dudas y la confusión entre la población.

Ahora la nota la dio César Camacho Quiroz quien declaró tener reuniones con el Príncipe de la Basura, para evaluar la presencia del partido en la Capital del País. «Sí, me he reunido con Cuauhtémoc Gutiérrez y seguramente mantendré la puerta abierta. Cuauhtémoc Gutiérrez ha desplegado durante muchos años una presencia política personal y grupal que para nosotros no sólo es respetable sino importante».

Para Camacho Quiroz, entonces es mucho más importante que un presunto criminal le acarree votos, que sea leal con su partido y respetuoso de las órdenes que se le dan, que exigir una investigación seria por parte de las autoridades. Los favores que Gutiérrez ha hecho a muchos políticos parecen ser enormes, pues a pesar de no recuperar el DF en ninguna elección después de 1997, perder presencia en el congreso, tener miembros que se meten en escándalos frecuentemente, haber sido expuesto por diversos medios de comunicación sobre su red de prostitución, su grupo de edecanes, entre otros asuntos más, abiertamente le extienden la mano, lo arropan, lo protegen.

Así de importante es el papel de una persona que a pesar de todas sus fechorías, le abren las puertas del partido y las autoridades hacen caso omiso de las acusaciones. Impunidad total sobre los actos de Gutiérrez de la Torre quien parece haber resuelto todos sus problemas al quitar una manta de la fachada de un edificio, pagar a medios de comunicación para que lo pusieran como la víctima calumniada, borrar perfiles de redes sociales y entonces seguir caminando por las calles con toda libertad.