En el mundo de la política, hay muchas historias que nos llevan a preguntarnos ¿¡Qué mierda tienen en la cabeza los políticos!? El historial de apoyo a cierto partido no debería ser único factor para ser designado representante; el repartir puestos para pagar favores es muy común…por desgracia, en esta categoría hemos visto, familiares, amigos, secretarias, parejas sentimentales y un gran etc. de personas sin preparación para el servicio público. Carmen Salinas es una de las elegidas en las elecciones intermedias del 2015 y lejos de sumarle popularidad al gobierno priista, le resta puntos de su escasa aceptación.
La señora con su tono desparpajado le echa más puños de tierra a la imagen del partido que la respaldó para ocupar una curul en la Cámara de Diputados, pensando tal vez, que con sus respuestas sacadas de un diálogo de espectáculo de carpa ganará simpatías…¡ERROR!
Al momento la petición hecha por Carlos Portuguez lleva más de 66 mil firmas, en ella pide que se le quite el puesto a la señora Salinas. No sabemos si el gobierno lo tome en cuenta, lo más probable es que no, pues al momento sólo han volteado la mirada a otro lado sin ofrecer una postura clara.
Al momento parece que alguien ya la regañó o simplemente se hartó y ocultó su cuenta de Twitter.
Así los representantes.
